Hace casi cuatros años que lleva abierto este excelente restaurante ubicado en el número 115 del paseo de la Castellana, a pocos metros de la plaza de Cuzco. Su cocina toma orientaciones de Latinoamérica, principalmente Perú y de Asia, en concreto de Singapur y a la combinación de ambas raíces se debe su nombre, Latasia.
La carta es breve pero extraordinariamente apetecible, de hecho, resulta complicado decidir qué pedir. En esta primera visita comenzamos con la la ensaladilla rusa, con camarones fritos y tobiko (huevas de pez volador), muy rica. Continuamos con el "Sio Pao de Ají de Gallina", una especie de hakao en cuanto a su forma, pero parecido a un bao, en cuanto a su textura; más rico aún que la ensaladilla. Seguimos con el "Ceviche limeño de ají amarillo", de corvina obviamente. Antes del postre, terminamos con un plato fuera de carta, la costilla de vaca madurada, con parmentier y salsa cantonesa. En fin, las fotos casi hablan por si mismas...
Acompañamos la cena con un vino muy agradable, Raso de Larrainzar y terminamos con un mochi de cheescake.
Como conclusión: MUY BUENO. Servicio muy atento y agradable
Precio medio: 35 euros por persona, bebidas aparte.
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